Peregrinos de la misericordia
El año pasado dos ex profesoras del
colegio que están colaborando en la Parroquia Jesús Misericordioso, nos invitaron a visitar el Santuario en el marco del año de la Misericordia, propuesto por el Papa Francisco. Como respuesta a esa invitación
programamos cinco peregrinaciones, una para cada curso del nivel medio.
La
peregrinación es un gesto muy significativo, representa el camino de nuestra
vida, los encuentros, dolores y esperanzas compartidos…
El miércoles 10 de agosto realizamos la primera con los alumnos de 5º año,
preparados por su
catequista, Paula, acompañados por el Padre Mario de la Parroquia San Pablo y por algunos docentes.
Caminamos en primer lugar hacia el Santuario Mariano de la Virgen de Schöenstatt. Allí Las Hermanas realizan una lindísima misión en el Hospital Pirovano , para colaborar con ellas, los chicos hicieron una campaña de elementos de higiene personal para los pacientes del hospital, que dejaron en el Santuario. Allí nos estaba esperando la Hna. María Ester que hizo repicar la campana de la pequeña y hermosa capilla a modo de bienvenida. Su testimonio fue un verdadero “descanso” en el camino. Esa misma tarde le envió un mensaje al Rector, donde expresaba :
Caminamos en primer lugar hacia el Santuario Mariano de la Virgen de Schöenstatt. Allí Las Hermanas realizan una lindísima misión en el Hospital Pirovano , para colaborar con ellas, los chicos hicieron una campaña de elementos de higiene personal para los pacientes del hospital, que dejaron en el Santuario. Allí nos estaba esperando la Hna. María Ester que hizo repicar la campana de la pequeña y hermosa capilla a modo de bienvenida. Su testimonio fue un verdadero “descanso” en el camino. Esa misma tarde le envió un mensaje al Rector, donde expresaba :
“Fue un testimonio muy lindo ver llegar
a los chicos. Hubo personas que se emocionaron y para
ellos fue una respuesta de Dios volver a creer en jóvenes que rezan...
Dígales
a los chicos que se puede evangelizar también caminando, siendo testigos del
amor de Jesús y de María. Gracias también por la generosidad de los alumnos…”
Finalmente, llegamos al Santuario de Jesús Misericordioso. Recibidos por un grupo de personas de la comunidad, atravesamos la Puerta de la Misericordia, contemplamos y rezamos delante de la imagen de Jesús y dejamos nuestras intenciones.
Creemos que este tipo de actividades son fundamentales en el proceso de educación de nuestros alumnos. El testimonio brindado por las personas que nos recibieron y el de los compañeros y docentes caminando juntos nos acercan a la realidad de la palabra “Misericordia”.
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